Anticristo

Que sí, pesados, que esto no tiene nada que ver con Turquía. Pero ya que con esto del viaje he conseguido máxima audiencia (y supongo que ahora más, porque comienza Septiembre y la gente vuelve a casa), tendré que aprovecharla... ¿no?
Pues la historia es simple... "Me apetece ver una peli". Voy a CineTube. "A ver si está Inglorious Basterds...". Inglorious Basterds, como dicen por aquí, yok. "¿Y qué hay?". ¡Coño!¡Anticristo de Von Trier! Pues vamos a verla...
Yo ya sabía tres cosas antes de ver la película... La primera es que había tenido bronca al estrenarla (lo normá). La segunda es que iba a ser (¿cómo no?) de mucho sufrir. La tercera es que, incluso con bronca y "mala crítica", este tipo sabe hacer cine y merece la pena echarle un vistazo.

Voy a revelar algunos detalles de la trama. Pero lo voy a hacer bien y no como este gilipollas de El Mundo, que los destapa todos y además mal porque debe ser el primo retrasado de Pedro J. quien se encarga de hacer las críticas cinematográficas en verano.
La historia, como otras veces, está dividida en varios capítulos, Prólogo y Epílogo incluidos. A la pareja protagonista (Willem Dafoe y Charlotte Gainsbourg, que se merecen no volver a trabajar en décadas después de este pedazo de curro) se les muere el niño y ella se queda hecha una piltrafa. Él, que es psicoterapeuta o algo parecido, toma a su mujer como paciente para intentar ayudarla. Y como parte de la terapia se van al campo.
Después, gradualmente, la película se desmadra muchísimo hasta convertirse en una de las mejores películas de terror (si es que esto es exactamente terror) que he visto en mi vida. Ahora bien, también es una película absolutamente explícita. El efecto es, en realidad, similar al que uno experimenta cuando ve Funny Games (mejor la alemana que la norteamericana, aunque comparten la esencia), pero a través de los medios totalmente opuestos; frente a la omisión, lo explícito. Pero no es la violencia explícita de un videojuego ni de la típica película de tiros, y ni siquiera se podría comparar, por ejemplo, con una salvajada como Hostel. Porque la exhibición explícita no es el fin de la película, sino un medio para contar otra cosa.
Y esa otra cosa, me da a mí la impresión, es la relación entre el ser humano y sus miedos. Pero no se trata de una película de terror convencional y tampoco trata los miedos convencionales.
Un ejemplo:
En el fondo el espectador sabe que no se puede tener miedo a Freddy Krueger porque tal personaje no existe. Del mismo modo, y aunque sea algo más realista, tampoco veríamos razonable tenerle miedo a los dos buenos chicos de Funny Games ("esas cosas", decimos, "no pasan"). Pero, por el contrario, podemos encontrar en este mundo algo tan real como la soledad; y es mucho más difícil no tener miedo a quedarse solo.

Pues bien, mi impresión es que Von Trier, a través de una película "de terror" (es decir, de las que normalmente tratan los miedos "irreales"), trata ese segundo tipo de miedos (llamémoslos, por oposición, "reales").

Si nos ponemos técnicos, las interpretaciones son absolutamente brillantes. El guión es bueno (no es una película aburrida y estamos hablando de 100 minutos con sólo dos personajes en la pantalla). Y la dirección, pues muy suya, claro, pero buena al fin y al cabo. Ahora bien, se sigue pasando siete pueblos.
¿Defectos? No termino de verle el sentido a los títulos de los diferentes capítulos. Tampoco tengo claro si Von Trier intenta mostrar de alguna forma la crueldad como parte esencial de toda la naturaleza (tal vez es sólo un señuelo para hacer fluir mejor el argumento). Y hay un par de cuestiones que quedan sin explicar claramente pero que, a mi juicio, son fáciles de aclarar si el propio espectador hace de terapeuta cinco minutitos.

Ahora bien, incluso si a alguien no le gusta el resto de la película, los minutos del Prólogo son, en sí mismos, una obra de arte. Un poco especialita, pero una obra de arte.