AVISO IMPORTANTE

ESTE BLOG YA NO ESTÁ ACTIVO.

El autor tiene un nuevo blog en

http://fairandfoul.wordpress.com

31/10/10

Erasmus en Estambul (33)

20:43 de la noche. Hoy más noche que ayer, puesto que aquí también nos han cambiado la hora... Estoy (de nuevo) solito en casa, tranquilo, recién cenado, algo cansado, y dispuesto a irme a dormir en cuanto Émilie, que en estos momentos debe estar en un avión que aterriza en Izmir, dé señales de haber llegado sana y salva a ese macro-Benidorm donde, por otra parte, debe hacer bastante mejor tiempo que aquí (sol, sí, pero más frío que nunca; aunque eso significa mínimas de 5-10 grados y máximas de 15-17, lo cual parece ser el pico mínimo habitual en la parte más cruda del invierno).

Esta ha sido una semana "corta en deberes" (tuve clases sólo hasta el miércoles) pero "larga en actividades", con la visita del bueno de David y después, y en paralelo, la de Émilie. La verdad es que el mal tiempo, el hecho de que David ya hizo con el grupo de turcólogos todo el turismo importante de Estambul, y que él vino aquí más para recoger fuentes para su tesis que para hacer de turista español, nos han permitido tener una semana mucho más tranquila de lo que podría haber sido si la cosa hubiera ido de museos, mezquitas, iglesias y demás (eso, por otra parte, le hubiera permitido a David tener una vida más autónoma esta semana y no perder prácticamente los dos primeros días en la sala de estudio de mi Universidad).
El jueves, cuando llegó Émilie, tuvimos (nosotros, es decir, David, Émilie y yo) un entrañable encuentro de turcólogos en el Sanat con Daniel, Olga y Necat. Fue gracioso encontrarnos de nuevo, en Estambul, durante unas horas, una parte tan "grande" del peculiar grupo que se formó hace algo más de un año gracias a la cortés invitación del Ministerio de Cultura y Turismo turco. Algunos de nosotros nos hemos visto más durante el año (Émilie y yo, por supuesto, y ambos con Daniel, pero también, aunque no mucho, Necat y Olga), pero para otros fue la primera ocasión de reencuentro (en mi caso, con Necat y, el resto de la semana aparte, con David). Nos pusimos, claro, oportunamente al día, bebimos cervezas (algunos más que otros) y, por supuesto, nos sacamos fotos (aunque yo, de momento, no las tengo).

El viernes, Día de la República, salimos también a dar un paseo, aunque por desgracia no vimos nada especialmente llamativo a pesar de ser la festividad nacional por excelencia (muchas banderitas, sí, pero nada más). Ayer, finalmente, un paseo más largo (fuimos a la zona de la Mezquita Azul, no queríamos que David se volviera a España sin verla de nuevo), un tecito en casa con Olga y Aycan (su marido) y velada tranquila (que quiso ser fiesta pero no fue porque avisé esa misma mañana y nadie pudo venir) con música turca y conversación agradable hasta que acompañamos, pasada la medianoche, a David hasta su autobús. Hoy, finalmente, día tranquilito en casa, desayunando en abundancia, viendo Ciudad K y disfrutando de nuestra mutua compañía (primeras horas solos de verdad desde hace más de un mes), hasta que nos hemos ido al aeropuerto.

En cuanto al atentado, la verdad es que las informaciones al respecto son más bien crípticas... Parece claro que la explosión se ha producido en la Plaza de Taksim cerca del rinconcito de la plaza donde están los dos autobuses de policía (autobuses, sí, y no lecheras, que a los policías turcos les gustan los juguetes grandes). Hay policías heridos (casi la mitad) pero también civiles. Esta mañana, aunque las agencias anunciaban alboroto que se trataba de un atentado, parece que en realidad eso sólo era hipótesis de la prensa turca y no de la policía. A estas alturas del día, sin embargo, todavía no he visto en ningún sitio que una organización reclame la autoría del atentado, y la verdad es que eso no deja de chocarme. Como dice siempre el bueno de Verstrynge, un atentado se hace para reclamarlo, esa es la idea; que nadie lo reclame, por tanto, es sospechoso.
Yo además he pasado por el lugar esta tarde (el cerco policial seguía, aunque a las cinco de la tarde no ocupaba ya toda la plaza, y era aún menor cuando he vuelto a las ocho) y puedo asegurar que la calle estaba intacta (también las imágenes grabadas justo después del atentado muestran que los autobuses están prácticamente intactos y sólo un cuerpo, en mi opinión más pequeño que el de un adulto, ensangrentado en el suelo -¿tal vez de un perro?-). Treinta y dos heridos, además, me parecen muchos heridos, y esta mañana las informaciones hablaban de quince; aunque suene bruto, no sé yo si este duplicarse del número de víctimas es razonable (cuando hay treinta y dos personas heridas, de verdad lo ves y hay sangre y se nota)... Y, además, digo yo: si un tipo lleva consigo una carga explosiva tal que puede herir a 32 personas en un espacio tan grande como el de la Plaza de Taksim a las diez de la mañana, entonces (y perdonad que sea tan gráfico) todavía a estas horas debería haber cachitos de terrorista esparcidos por la plaza. Y no había cachitos.

Total: [1] nadie reclama (nadie parece haberlo hecho) la autoría del atentado, [2] se cuentan primero dieciséis y luego treinta y dos heridos como si de cada persona herida se pudiera hacer dos sin tener que aumentar la fuerza de la explosión y la visibilidad del atentado, [3] no son visibles los daños materiales de la explosión.
No quiero ponerme conspiranoico (y menos con estas cosas, porque igual -es más que posible- me equivoco), pero tengo que decir que yo he visto a policías turcos pasearse por la plaza de Taksim armados con ametralladoras (MP5A5, para los pofesionales) y llevándolas como si fueran una bolsa de supermercado (os juro que si el tipo se hubiera rascado la cabeza con aquel cacharro no me hubiera sorprendido). Partiendo de esa experiencia, me parece plausible que uno de estos garrulos armados haya decidido traerse esta mañana a Taksim, para su turno de patrulla del domingo, un juguete explosivo; evidentemente es un juguete totalmente innecesario cuando tu cometido es vigilar una plaza y una calle peatonal llena de comercios donde los crímenes más graves cometidos son la venta ambulante ilegal y el carterismo. Pero también es innecesario llevar una ametralladora y lo hacen.
Y, si esto es plausible, ¿no lo es que a este mismo garrulo se le escape el cohetito y hiera gravemente a dos o tres compañeros? Claro, si eso pasa, es mucho mejor decir que ha habido un atentado: ningún político reconocerá jamás que el cuerpo de policía que actúa bajo su responsabilidad está formado por garrulos sin graduado escolar que juegan a vestirse como Rambo cuando sólo tienen que sacar fotos a los turistas, espantar a los vendedores y disuadir a los carteristas.
Tal vez (incluso posiblemente) no sea cierto en esta ocasión, pero que sepáis que no me sorprenderé si un día sucede...

Me despido con una "buena noticia": YouTube vuelve a funcionar (al menos de momento), así que me aprovecharé a partir de ahora.

2 comentarios:

Aiguasalada dijo...

La verdad es que cuando he leído la noticia esta mañana quería escribirte algo, pero he decidido no dejarme llevar por las emociones y esperar a ver qué explicabas. Y lo que escribes me hace darme cuenta que tengo que leer menos y preguntar más... (entendiendo lo de "leer menos" según que fuentes, claro). Besos desde Viena.

Anónimo dijo...

Muy buenas, despues de hacer unas mil visitas, he aparecido aqui, y la verdad es que creo que igual no molesto, pero estoy interesada en irme de Erasmus el año que viene a Estambul, y la verdad es que necesito algo de informacion. :)

dificildiaxoelmjor@hotmail.com
soy Ainhoa Martinez, y la verdad es que estaria encantada si no te parece mal en preguntarte cosillas!
un saludo